23 jun 2014

La Primera Guerra Mundial 1914-18. El origen.

Antecedentes del apocalípsis.


     Hace 100 años se originó un conflicto cuyos motivos han sido complejos y numerosos; un cúmulo de acontecimientos provocaron un apocalípsis bélico que supuso una entrada trágica al S. XX para un mundo acostumbrado a las maneras del S. XIX.
      Entre 1871 y 1914 muchos factores fueron desestabilizando el precario equilibrio que había entre las potencias europeas. Los principales fueron el desmedido imperialismo que practicaban dichos países (sobre todo en África), el surgimiento de Alemania como potencia y una rivalidad que abocó en acuerdos y alianzas entre bloques antagonistas, todo ello aderezado por el nacimiento de varios movimientos nacionalistas en el seno de los imperios.





Alemania, nueva potencia europea. 

     La victoria  de Prusia sobre Francia en la guerra de 1871 permitió la unificación de una nueva Alemania y la creación de una nueva potencia en pleno corazón de Europa. El surgimiento de Alemania como potencia contribuyó al aumento de las tensiones entre los estados europeos. El comportamiento germano de querer impulsarse a nivel militar y económico terminó por levantar muchos recelos entre los demás estados europeos, tensando las relaciones diplomáticas.


Francia se rinde ante Prusia, 1871

Bismarck y Guillermo II 






  De 1890 a 1914 la población alemana pasó de 49 a 66 millones de habitantes, acompañando un desarrollo económico sin precedente entonces. Alemania exportaba más acero que Francia, Rusia y Gran Bretaña reunidas, y era el segundo productor de carbón, tras los ingleses. Ese poder industrial permitió la mejora de la capacidad militar de un país que ya tenía de por sí un ejército instruído y bien equipado. Asimismo, la marina de guerra alemana era la segunda más poderosa del mundo, tras la de Gran Bretaña.


     La política exterior llevada a cabo por Otto von Bismarck entre 1871 y 1890 consiguió la firma de varios tratados y alianzas (casi siempre con cláusulas secretas), aunque siempre con el objetivo de preservar el equilibrio europeo. En 1879 se firmó la Doble Alianza con el imperio austro-húngaro, con obligación de ayuda mútua en caso de ataque provocado por la imperialista Rusia de los zares. Además con ello Bismarck tenía la esperanza que los austro-húngaros desviasen su atención de los Balcanes. Más al contrario, los austríacos aumentaron su represión contra los movimientos nacionalistas balcánicos, provocando una indeseada agitación en la región. Italia solicita su inclusión en el acuerdo, que pasa a denominarse la Triple Alianza. En 1887 Alemania firma en secreto con Rusia un tratado que estipulaba la neutralidad rusa en caso de conflicto con Francia y la neutralidad alemana en caso de un ataque ruso al imperio austro-húngaro, así como el apoyo diplomático alemán a la política rusa en los Balcanes. Bismarck afirmaba que esa duplicidad de tratados permitía a Alemania actuar con flexibilidad en frentes diferentes.
    
     Pero a partir de 1897 el Kaiser Guillermo II anuncia su nueva Weltpolitik, "política mundial", justificada por la dependencia de la industria alemana, cada vez más poderosa, de las importaciones de materias primas. Al contrario que la diplomacia maquiavélica de Bismarck, la Weltpolitik incidía en hacer un hueco entre las potencias a la nueva Alemania y adquirir nuevos territorios que tuviesen las necesarias materias primas, casi todos ellos en ultramar. Esta Weltpolitik, llevada a cabo por von Bülow, necesitaba una poderosa fuerza naval que consiguió poner en activo el diligente almirante von Tirpitz. Esto y la ambición alemana de incrementar su imperio colonial despertaron los recelos de franceses y británicos, desembocando en unas tensiones que, sumadas a otras, llevaron al mundo hacia una guerra sin igual hasta entonces.


El Kaiser y sus generales.

El imperialismo europeo y su repercusión.



     La aparición y desarrollo imperialista europeo avivó las tensiones diplomáticas y militares desde 1880. Gran Bretaña, Francia, Alemania, Bélgica, Portugal, Italia y en menor medida España se repartieron territorios en África, colonizando el 90% del continente negro. Además las potencias europeas, incluída Rusia, también estaban mirando hacia Asia e intentando imponer sus colonias. Para gran parte de estos estados el imperialismo era un nuevo tipo de competencia para incrementar sus riquezas y poder, al fin y al cabo asegurar su supervivencia.




Las potencias europeas repartiendo África en la conferencia de Berlín
(caricatura de la época).
    
     En un intento de acuerdo pacífico se organiza la Conferencia de Berlín (1884-85) para el reparto de los vastos territorios africanos, pero a pesar de todo la carrera por conseguir territorios llegó a enfrentamientos entre potencias, como la crisis de Fachoda entre franceses y británicos (1898) y a la guerra ruso-japonesa (1904-05) que ganó inesperadamente Japón. La Weltpolitik alemana no hacía sino subir la tensión de toda esta carrera europea por incrementar colonias. 

     Al otro lado del atlántico los Estados Unidos de América comenzaban a reclamar su trozo de pastel, pugnando con una agotada y arruinada España por hacerse con los restos de su antiguo imperio . 



La crisis búlgara y el avispero de los Balcanes.

     En 1876 estalla en Bulgaria una sublevación contra el imperio otomano. Los rebeldes estaban apoyados por Serbia, Montenegro y Rusia. La crisis desembocó en una guerra entre Rusia y Turquía (1877-78) y la consiguiente derrota otomana. Bulgaria se erigió en país independiente, Rumanía y Serbia recibieron compensaciones territoriales y los imperios ruso y austro-húngaro se guardaron el derecho de supervisar Bosnia-Herzegovina, hasta entonces territorio otomano. Dichos acuerdos irritaron a Gran Bretaña, que consideraba concedían demasiado poder a Rusia en el corazón de Europa.


Uniformes de la 1ª Guerra de los Balcanes



     Fue cuando el canciller Bismarck, como mediador, propuso organizar en 1878 un congreso en Berlín y firmar un tratado para intentar limitar la influencia rusa. Serbia, Montenegro y Rumanía consiguieron su total independencia, y se acordó poner a Bosnia-Herzegovina bajo control único de la administración austro-húngara. Para que el imperio otomano conservase cierto equilibrio se le concedió los territorios del sur de Bulgaria (la llamada Rumelia), lo que provocó el levantamiento de los nacionalistas eslavos, que pedían reunificarse con el resto de Bulgaria. Rusia aprovechó el pretexto para ocupar ese territorio y aumentar sus posesiones, lo que disgustó a los austro-húngaros que, con el apoyo de Bismarck, lograron que se retirasen de allí las tropas del zar Nicolás II
     Esta crisis búlgara se llevó por delante a Bismarck y su diplomacia de mediación, además de la disolución del tratado de ayuda mútua entre Rusia y Alemania. El canciller fue depuesto en 1890, y el Kaiser Guillermo II endureció la diplomacia y las demandas internacionales de Alemania. 

     La agitación en los Balcanes, lejos de mejorar, se fue agravando poco a poco. Las demandas de las diversas etnias y el creciente nacionalismo afectaban al estado político y militar de los dos imperios que dominaban esa región, el austro-húngaro y el otomano. En 1903 moría asesinado el rey de Serbia Alejandro 1º; su succesor en el trono Pedro 1º era hostil al imperio de los Habsburgo y al otomano, por lo que firmó una alianza militar con Rusia. Tras la anexión austríaca de Bosnia-Herzegovina en 1908, crea y lidera la Liga de los Balcanes (1912), compuesta por Bulgaria, Grecia, Montenegro y la propia Serbia. Immediatamente la Liga declara y gana la guerra a una Turquía en crisis, que venía de ser derrotada en Libia por Italia. Pero entonces Bulgaria considera que sale perdiendo de las compensaciones territoriales, acusa a Serbia de traición y le declara la guerra a su vez en 1913. Como resultado del conflicto los serbios ganan dominios en Macedonia, y Turquía recupera territorios búlgaros perdidos en la guerra de 1912. Serbia incrementa su influencia en la región y su siguiente reivindicación es el territorio de Bosnia-Herzegovina, que considera sagrado, pero que está bajo dominio innegociable de Viena.


Posición serbia en Bregalnica, donde derrotaron al ejército búlgaro (2ª Guerra de los Balcanes).

El sistema de alianzas.


     Las primeras alianzas europeas fueron la Doble Alianza (Austria-Hungría y Alemania, 1879) y la Triple Alianza (los dos anteriores más Italia, 1882). El apoyo alemán al imperio austro-húngaro en las crisis balcánicas provocó la firma de una alianza franco-rusa en 1895. El objetivo de dicha alianza era oponerse a las ambiciones alemanas.

Alegoría de la época de la Triple Alianza.


     Estas alianzas suponen el desarrollo de correspondientes planes militares; el general von Schlieffen expone en 1905 un plan de un ataque rápido que consiga la caída de Francia y a continuación concentrar a la totalidad del ejército alemán en el frente ruso. Por su lado el estado mayor ruso planeaba una rápida invasión de Austria-Hungría.

     La única potencia que quedaba fuera de esas alianzas era Gran Bretaña. Aunque la rivalidad naval alemana, la potencial amenaza de Rusia sobre la Indias británicas, la de Japón en Asia y la de Francia en África obligó al gobierno de Su Majestad romper con su aislamiento. La primera alianza se forjó con Japón en 1902 (lo que animó a los nipones a entrar en guerra contra Rusia). En 1904 se firma la Entente Cordial con Francia, lo que permite superar las diferencias de las dos potencias en África y Asia (no era una alianza militar, en contra de lo que pensaba el Kaiser alemán).



     Una primera crisis enfrenta diplomáticamente a los 2 bloques; en 1905 Guillermo II hace una entrada triunfal en Tánger para apoyar oficialmente al sultán de Marruecos contra la pretensión francesa de instalar un protectorado. En 1906 se organiza una conferencia internacional en la ciudad española de Algeciras, donde Gran Bretaña, Rusia, Estados Unidos e Italia acaban por dar la razón a las posturas francesas, lo que supone un revés diplomático para Alemania.


El Kaiser Guillermo II visita Tánger, provocando una crisis diplomática con Francia.

      La tensión con Rusia y Gran Bretaña se incrementa en 1908 por el apoyo alemán a la anexión de Bosnia-Herzegovina por parte del imperio austro-húgaro.

     En 1911 una nueva crisis en Marruecos está a punto de provocar un conflicto armado. Guiada por su Weltpolitick, Alemania pretendía frenar la expansión de Francia en en norte de África; con la disculpa de unas revueltas populares contra el sultán marroquí envía navíos de guerra a la bahía de Agadir, aludiendo a la ayuda pedida por empresas alemanas. La reacción francesa no se hace esperar, y exige la retirada immediata de los buques armados alemanes; la guerra está a punto de estallar. Solamente unas negociaciones de última hora consiguen evitarlo, en las que Alemania consigue a cambio del desbloqueo la extensión de sus territorios en el Camerún, pero con la evidencia de que su único aliado real (y no demasiado útil) frente a las otras potencias es Austria-Hungría.


"El equilibrio europeo" (caricatura de la época)

La crisis de julio de 1914. El estallido.

     El archiduque Francisco Fernando, heredero del emperador Francisco José en el trono de los Habsburgo, decide realizar una visita a Sarajevo, capital de Bosnia-Herzegovina, el 28 de junio. Sus consejeros le suplican que anule la visita, que seguramente indignará a los nacionalistas serbios en una fecha sagrada para su causa. El archiduque rebate el argumento sin conceder importancia a la advertencia.

El archiduque y su esposa salen de la recepción del ayuntamiento de Sarajevo.
    
     Lo que no sabía es que la organización secreta serbia "Mano Negra", liderada por militares, llevaba meses planeando un atentado contra su figura. Inconsciente del peligro, el archiduque dispone la visita por la calles de Sarajevo con su esposa en un coche descapotado. El día no puede comenzar peor: escapa milagrosamente de un primer atentado con bomba, ya que el artefacto rebota contra el automóvil. En lugar de anular el resto de la visita, decide continuar con la recepción en el ayuntamiento; a la vuelta del acto el conductor comete un error metiendo el coche en una calle indebida; era el momento que estaba esperando Gavrilo Princip, nacionalista serbo-bosnio. Dispara su pistola (facilitada por los servicios secretos serbios) contra Francisco Fernando y su esposa Sofía. Los dos morirán de camino al hospital. Es la chispa que incendia el polvorín.

Recreación del atentado mortal de Gavrilo Princip contra los archiduques.

     El conde von Berchtold, ministro de asuntos exteriores del imperio, llevaba tiempo esperando un motivo para someter a Belgrado. Aprovecha el incidente de Sarajevo para la invasión de Serbia; el gobierno alemán incompresiblemente va a apoyar ciegamente a su aliado, sin medir las consecuencias que tendrá el conflicto. El 20 de julio los gobiernos francés, británico y ruso se citan para reforzar su alianza en caso de guerra imminente. El 23 Austria-Hungría envía un ultimátum de 10 puntos a Serbia.

Ultimátum austríaco a Serbia en la prensa.
     

    Forzados por Rusia los serbios aceptan la mayoría de lo puntos y acceden a negociar,  pero Austria-Hungría se niega: aludiendo la no aceptación de los 10 puntos, declara la guerra a Serbia el 28 de julio de 1914. Las alianzas reaccionan en cadena. Rusia decreta la movilización general y el 1 de agosto Alemania le declara la guerra, con la intención de ganar tiempo antes de que las tropas rusas lleguen a la frontera. El 2 de agosto solicita autorización a la neutral Bélgica  para el paso de tropas. Pero no espera respuesta y el día 3 invade territorio belga y también le declara la guerra a Francia.



    
  El día 4, en consecuencia Gran Bretaña entra en guerra contra Alemania. Es el inicio de la Primera Guerra Mundial, que se auguraba de corta duración, y que se alargó durante 4 largos y terribles años. 


      Una guerra que no quería nadie, pero para la que todos se estaban preparando.

Declaracion de guerra de Alemania a Rusia y Francia en la prensa



15 jun 2014

Dwigth D. Eisenhower

Eisenhower, "Ike" el conciliador.


     Dwigth D. Eisenhower ha sido seguramente el oficial más famoso del Ejército de los Estados Unidos, y el más capaz del período de la 2ª Guerra Mundial.

El cadete Eisenhower
Con un tanque del 1er Cuerpo Acorazado US

    Nacido en Texas en 1890, creció en el seno de una humilde familia con cinco  hermanos en Abilene (Kansas). 
    Con mucho esfuerzo logra ingresar en la prestigiosa academia militar de West Point, de la que sale graduado en 1915. 

  
   Intenta que lo destinen a Francia para combatir en la Gran Guerra, pero únicamente consigue alguna responsabilidad en puestos de entrenamiento en el embrión del Primer Cuerpo Acorazado, siempre en territorio norteamericano.
  
    Posteriormente se gradúa como primero de su promoción en la Escuela de Estado Mayor y Mando. En 1933 es destinado a Filipinas, donde ejercerá como Jefe de Estado Mayor y ayudante de campo de Mac Arthur, hasta 1939 cuando regresa a USA para el mando de un batallón de infantería; curiosamente éste sería su único mando directo de tropas en toda su carrera. Con la entrada en guerra de los americanos es nombrado jefe del Estado Mayor del 3er. Ejército y consigue la estrella de general de brigada. Una carrera constante, pero poco propicia a entrar en la historia.

Entrevista con el Gral. Marshall 
  
   Poco después el general Marshall lo llama a Washington para encomendarle una misión sin apariencia brillante, pero que realmente terminó siendo de gran responsabilidad. Se estaba iniciando con los aliados una planificación estratégica para la invasión del continente europeo. Marshall lo pone al mando de las tropas estadunidenses en el Reino Unido y en junio de 1942 se instala en Londres para empezar a planificar el asalto cruzando el canal de la Mancha.



"El arte de lo posible"


     A finales de 1943 cambian los planes aliados, dando prioridad a la Operación Torch y los desembarcos en el norte de África. Eisenhower es nombrado comandante en jefe de la operación; es cuando empieza a poner en práctica su "arte de lo posible", y a demostrar sus dotes humanas para conciliar las diferentes reclamaciones y los diferentes intereses de los aliados. Con su natural simpatía, practicando la empatía y una diplomacia adecuada logra unir y coordinar a las fuerzas aliadas en el África noroccidental. Cosa complicada si añadimos el problema francés en esa zona: en sus filas contaba los las fuerzas de la Francia Libre del general De Gaulle (por el que nunca tuvo simpatía) y el ataque se dirigía contra colonias francesas todavía controladas por el gobierno de Vichy, colaboracionista con Alemania.

La relación con Charles de Gaulle era tensa
Sherman destruido en el paso de Kasserine
   

    Pero también supo tener mano dura cuando las novatas tropas norteamericanas estuvieron a punto del desastre tras la batalla del paso de Kasserine y sus secuelas. No dudó en purgar a los oficiales incompetentes y ordenó mejorar las tácticas y el entrenamiento de las unidades.


     Tras la Conferencia de Casablanca se le ordena la planificar la invasión de Sicilia, misión que cumple nuevamente con habilidades de organización y diplomacia, dejando el mando efectivo de las tropas terrestres al británico Alexander.


Revista de tropas británicas con el gral. Alexander

Normandía y la invasión del continente europeo.

     A finales de 1943 llega el momento más importante de su carrera militar: se le confía el mando supremo de todas las unidades aliadas de tierra, mar y air de la zona atlántica con el objetivo de desembarcar en Normandía y proceder a la liberación militar del occidente de Europa ocupado por la Alemania nazi.
     En este ejercicio de gran responsabilidad es donde nuevamente salen a relucir las cualidades de "Ike": modestia y humildad, trabajo y compromiso, logra con su aptitud conciliadora llevar a cabo una pesada misión que podría haberse complicado mucho más por culpa de las rivalidades de los jefes militares y las divergencias políticas de los diferentes países de la coalición.
     Tras una ardua planificación táctica y estratégica, que incluyó un grandioso trabajo de inteligencia para engañar a Hitler sobre el lugar del desembarco, llega el decisivo Día D (que Eisenhower aplazaba agónicamente en el tiempo, lo que le suscitó muchas críticas de mandos y aliados, empezando por Stalin). El éxito de Normandía permite iniciar la liberación dparte de la Europa ocupada a lo largo de 1944. 

Pensativo en los preparativos del Día D
Animando a los paracaidistas del 502 Rgt. de la 101 Airborne, 5 junio 1944

Portada Time



     Pronto surgen problemas para el jefe supremo aliado: el británico Montgomery y otros generales americanos pugnaban atacar a lo largo de un estrecho pasillo hacia directamente Berlín, en contra de la opinión de Eisenhower que defiendía un avance sobre Alemania en un frente amplio.
Indicando a Tedder y Montgomery, con el que mantenía diferencias tácticas, frente Normandía 1944
    
 Ike, firme, mantuvo pacientemente su posición (incluso se habló de dimisión), sin ofender públicamente a quienes le criticaban. Su estrategia del frente amplio, aunque quizá prolongó la guerra en meses, era la más realista desde el punto de vista militar y políticamente la más acertada. También se le criticó su gusto por aparecer en persona en los teatros bélicos, pero era una táctica de relaciones públicas extremamente acertada. Su compleja posición tenía que ir más allá de lo estrictamente militar, debía aparecer como una figura pública que aglutinase el esfuerzo por la victoria final. 

Ike se ganaba la lealtad de los soldados por su simpatía
     
     El 7 de mayo de 1945 preside en Reims la firma de la capitulación alemana. Había logrado dirigir a los ejércitos aliados hasta la victoria final en Europa. 


"Ike", 34º presidente de los Estados Unidos de América.


     Finalizado el conflicto es ascendido a general del Ejército de 5 estrellas como comandante en jefe de las fuerzas americanas en Europa, hasta 1947. Posteriormente el presidente Truman lo nombra jefe supremo de las fuerzas atlánticas (1951-53).

     El partido republicano le convence entonces para que se presente a la elección presidencial, ya que lo ve como la única figura capaz de alternar a un partido demócrata que llevaba 20 años en el poder. Así fue y en 1953 gana las elecciones, e incluso sale reelegido con comodidad en las presidenciales de 1956.


Eisenhower jura su cargo en 1953
 A lo largo de sus dos mandatos, Einsenhower se comportó más como árbitro que como líder del partido republicano. A nivel interno, sin embargo, no pudo obviar el lado conservador del partido y se tomaron muchas medidas que favorecieron a los grandes intereses privados. Decisiones polémicas pero históricas fueron la abolición de la normativa que obligaba a los negros a ceder sus asientos en los transportes públicos y la eliminación de la segregación racial en las escuelas y universidades. 

Eisenhower presidente

     En la política internacional, Ike logró distendir la tensión en graves episodios provocados por la Guerra Fría entre occidente y el bloque soviético. Pacta la paralización de la cruenta guerra de Corea con la firma del tratado de Panmunjom (1953), promueve un estatuto para la creación de un estado en Austria en 1955 (luego vendría la crisis de Hungría al año siguiente), evita la directa implicación militar americana en la guerra francesa de Indochina (contrariamente a la posición años más tarde en Vietnam) e inicia negociaciones con la Unión Soviética que fructifican en el viaje de Kruschev a EEUU en 1959.

Recibiendo a Nikita Kruschev en su visita oficial a USA, 1959
     
     Eisenhower fallece en Washington en marzo de 1969.

Visita memorial Normandía, 1963

6 jun 2014

5 playas para el desembarco. Operación Overlord, 6 junio 1944 Día D

El desembarco de Normandía.


























5 playas para la invasión de Europa


Utah Beach

     Erwin Rommel, al mando de las defensas alemanas, no ignoraba que éste era un sector costero particularmente propicio para un asalto anfibio, al que acudía in situ en numerosas ocasiones para reforzar las defensas. Con ese fin se trufaron las dunas con una treintena de "nidos de resistencia" (Widerstandnesten). En las alturas posteriores se instalaron unas baterías de artillería pesada en las zonas de Azeville, Saint-Marcouf, Morsalines y La Pernelle. Además, para contrarrestar un ataque paracaidista, el mando alemán ordena la inundación de los valles del Douve y el Merderet, empantanando gran parte de la zona.




    En el plan táctico original los aliados no tenían previsto desembarcar en el Contentin, pero en 1943 Eisenhower y Montgomery deciden añadir a las playas ya fijadas una más, situada al oeste de la bahía de Veys, para apoderarse del puerto de Cherburgo lo antes posible. El lugar escogido se extendía en una zona dunar de unos 2 kilómetros de largo, entre Sainte Marie du Mont y Quinéville. Su nombre en clave: Utah. 


   
     El estado mayor aliado planifica el lanzamiento de 2 divisiones paracaidistas la noche antes del desembarco, para proteger el sector ante posibles contrataques hacia la playa. La 82 Airborne del general Ridgway tiene la misión de apoderarse del importante cruce de carreteras de Sainte Mère Église y de los puentes sobre el río Merderet. A su vez la 101 Airborne, bajo el mando del general Taylor, se dedicará a tomar el control de las salidas de las playas del sector Utah. Entre las cero horas y las 3:00 horas de la madrugada, cerca de un millar de aviones C-47 "Dakota" sobrevuelan el Contentin lanzando más de 13.000 paracaidistas, la vanguardia de la invasión aliada. Bajo malas condiciones climatológicas y presionados por la FLAK alemana, gran parte de los aparatos vuelan a demasiada altura y a una excesiva velocidad; la mayoría de los paracaidistas caen bastante lejos de la "drop zone" asignada, incluso a decenas de kilómetros. Muchos se pierden, se enredan en los árboles o se encharcan en los pantanos donde algunos se ahogan. Estos contratiempos impiden a varias unidades en mal estado cumplir con su misión. Por suerte los alemanes desconocen el alcance y el potencial de las fuerzas a la que se enfrentan.






 











  














     Los defensores son los primeros en abrir fuego contra los destructores americanos, a las 5:05 h. pero escuadrillas de bombarderos pulverizan las posiciones de los dos batallones alemanes en el sector. El general Collins, al frente del VII Cuerpo americano (cuatro divisiones) ordena el desembarco de la 4ª División de Infantería, a la que siguen unidades de Rangers y parte de la 90 Division de Infantería, con algunos tanques anfibios Sherman DD. Los alemanes, desconcertados y con las comunicaciones cortadas con su retaguardia, ofrecen escasa resistencia.



    Una defensa más enérgica hubiese resultado trágica para las tropas estadounidenses, ya que tuvieron que vadear 100 metros de agua hasta llegar a tierra, donde comprueban que se habían desviado casi 2 kilómetros de su objetivo, por culpa de las corrientes y las cortinas de humo; reciben la orden continuar al norte y hacia el interior hasta encontrarse con la 101 Aiborne que tenía aseguradas las posiciones de salida de la zona de desembarco. A pesar de algunas posiciones de fuego alemanas creando problemas desde las colinas, se pudo asegurar Utah al final de día, con un contenido coste humano de unas 200 bajas.






Omaha Beach

     Este sector resultó ser un duro escollo puesto que su complicada orografía convertía los puestos alemanes en idóneos para la defensa costera. Dos regimientos de infantería (914 y 916)  y un regimiento de granaderos (726) alemanes estaban repartidos en 14 "nidos de resistencia" (Widerstandnesten) unicados en lugares estratégicos, protegidos por barreras anticarro y casamatas de hormigón armados con cañones. Nidos de ametralladoras, morteros, campos de minas y alambradas completaban el sistema defensivo alemán. Evidentemente no era el lugar ideal para una operación anfibia, pero era el único posible entre el sector británico, al este, y Utah al oeste. En marzo de 1944 se había codificado con el nombre de Omaha.


      El V Cuerpo americano (3 divisiones) se enfrenta al reto, con la 1ª División de Infantería (Big Red One) en vanguardia. A las 6:30 h. se inicia el desembarco; las primeras olas de infantería reciben una lluvia de obuses o morteros, y los disparos de las ametralladoras las retienen y frenan en la propia playa. El mando americano conprueba espantado como los bombardeos aéreos y los de la marina del día anterior habían fracasado. Las defensas germanas, casi intactas, tenían a tiro la totalidad de la playa, causando una enorme mortandad entre las filas de los asaltantes.



    
     Para cúmulo de desgracias casi todos los tanques anfibios americanos se habían hundido antes de alcanzar tierra firme, privando a la infantería de un vital apoyo artillero. En la playa la situación empeoraba de hora en hora, agravada con la subida de la marea que reducía la parcela de arena operativa. El panorama era dantesco, cientos de cadáveres mecidos en el vaivén de las olas se amontonaban en la arena, innumerables heridos intentaban protegerse detrás de los escollos y de las carcasas humeantes de vehículos alcanzados por la artillería alemana. Muchas lanchas LCT que traían refuerzos se atascan en los "espárragos" (obstáculos defensivos) que los zapadores no pudieron destruir diezmados por el fuego alemán. Llegados a ese punto, la orden de reembarco pasó por la mente de Eisenhower.


    
     Tras un calvario de horas y esforzados combates los soldados americanos, poco a poco, consiguieron darle la vuelta a su terrible situación. No podían encarar las hondonadas de salida de la playa sin ser alcanzados, pero hacia el final de la mañana, a base de coraje y valentía, unidades de Gi´s consiguen escalar las laderas empinadas e infiltrarse en pequeños grupos en la meseta, flanqueando al enemigo y atacando sus posiciones por la espalda. La defensa comienza a vacilar. 


     
     Al finalizar la jornada la cabeza de puente en Omaha apenas alcanza los dos mil metros de profundidad, pero los americanos consiguen un objetivo esencial, ocupar un pedazo de terreno para desembarcar tropas y pertrechos . A pesar de un pésimo inicio la operación se culmina con éxito, eso sí, a un elevado precio de pérdidas humanas: 1.000 muertos y 2.000 heridos, el mayor sacrificio de todas las unidades participantes en la gran batalla del 6 de junio de 1944.



  


Pointe du Hoc

     En el sector Omaha, sobre un promontorio que destaca sobre el acantilado, se encuentra Pointe du Hoc, emplazamiento idóneo donde los alemanes habían edificado búnkers para artillería, desde donde tenían a tiro las dos playas donde iban a desembarcar los americanos. Los 6 cañones de 155 mm, capturados a los franceses en 1940, suponían una formidable amenaza. El mando aliado decidió no correr riesgos y neutralizarlos, asimilando que los bombardeos aéreos quizá no fuesen suficientes. 






     La peligrosa misión fue encomendada al 2º Batallón de Rangers, bajo el mando del Tte. coronel James Rudder. Tras saltar de las lanchas, las compañías D, E y F culminan el prodigio de escalar la resbaladiza pared, con cuerdas mojadas y bajo fuego enemigo. Se entabla un combate encarnizado, en medio de un terreno rocoso plagado de cráteres. Finalmente los Rangers se llevan una amarga sorpresa, verifican que los cañones no estaban en su emplazamiento habitual: los alemanes los habían movido 1000 metros hacia el interior unos días antes. Aunque aparentaban abandono, una patrulla consigue llegar hasta ellos e inutilizarlos con explosivos
    
     Poco después el 2º de Rangers sufre un contrataque por parte de refuerzos alemanes, soportando un asedio en unas posiciones precarias y de espaldas al mar, hasta el mediodía del 8 de junio cuando finalmente son rescatados por tropas que provenían de Omaha Beach; para entonces solamente 90 comandos (de 225) se encontraban en condiciones de combatir. Ochenta muertos resultó ser un precio demasiado elevado para una misión prácticamente inútil. 
















Gold Beach 

     Fue el nombre en clave adjudicado al sector costero que se extendía entre Omaha Beach (EEUU) y Juno Beach (Canadá). El desembarco lo llevaría a cabo el XXX Cuerpo de ejército Británico al este de Arromanches, donde los acantilados dan paso a una zona llana que precede a una zona más pantanosa. Para los hombres de la 50 Div. Northumbrian, vanguardia del asalto, el 6 de junio tenía sabor a revancha, ya que habían participado en la triste evacuación de Dunkerque en 1940. 


    
     Tras el preceptivo bombardeo aéreo y la barrera artillera ordenada por Montgomery, el desembarco comienza a las 7:25 h. Los alemanes de la 716 División Estática (2 regimientos de granaderos y tropas de apoyo) ofrecen una fuerte oposición y los dos extremos del sector resultan ser los más resistentes.



 

     
     Entonces acuden los carros de combate británicos de la 79ª División abriendo brechas entre las Osttruppen, soldados de la Wermacht de etnias del este incorporados a la fuerza y de escasa combatividad. Al atardecer el XXX Cuerpo ya había desembarcado 25.000 hombres en un cuadrilátero de 10 por 10 kilómetros. En la parte izquierda conectan con los canadienses de Juno y llegan a las puertas de Bayeux; sin embargo por la derecha encuentran muchos problemas para el avance, debido a la resistencia alemana en la zona limítrofe con Omaha que les impide contactar con los americanos. 

    
     En los días siguientes los británicos avanzan lentamente dirección sur, hasta verse frenados por la llegada al frente de la poderosa división alemana Panzer Lehr.


Juno Beach

     Este sector de desembarco, con numerosos pueblecitos costeros, situado entre Gold y Sword (las dos zonas inglesas) le correspondía a la 3ª División de infantería de Canadá del general Keller. Contaba además con el apoyo de la 2ª Brigada blindada y del 48º Commando de los Royal Marines. El objetivo era conectar hacia el interior con la 6ª División aerotransportada británica (lanzada el día anterior) y tomar el aeródromo de Carpiquet, al oeste de Caen, para luego avanzar hacia la capital del Calvados.


     
     A los canadienses se les plantean adversidades desde el primer momento: las malas condiciones del mar retrasan la llegada de los lanchones de desembarco. Al alcanzar las playas, sobre las 8:00 h. muchos encallan contra los obstáculos alemanes ocultos por la marea alta. En las idas y vueltas, varias LCT estallan a causa de las minas-trampa ocultas en los bajíos de la playa.


 
     

     Las defensas alemanas causan muchas baja a la infantería que pisa el arenal, debido al retraso de los tanques que debían cubrirlos. Los batallones Winnipeg Rifles y los Royal Canada Rifles son los que sufren las mayores bajas en las primeras oleadas. Pero los canadienses eran soldados intrépidos y luchadores, todos voluntarios por otra parte. Con esfuerzo y ardor guerrero logran traspasar las primeras defensas alemanas y alcanzar las zonas habitadas, entablando una lucha callejuela por callejuela, bajo el fuego de bolsas de resistencia alemanas que no se rendían y de los temidos francotiradores. En las playas se iban amontonando los vehículos pesados que no lograban salir debido al enorme atasco.


     
     Pese a las adversidades los canadienses logran avanzar. Al final del día habían desembarcado 21.000 soldados y equipo en una consolidada cabeza de puente de unos 12 km. de largo. Contactan con avanzadillas de la 6ª aerotransportada, y por el flanco derecho con los británicos de Gold Beach. Por contra por la izquierda los alemanes resisten todavía en un pasillo que los separa del sector británico de Sword Beach. 

    
      Desde el día siguiente, el 7, el avance canadiense se ve frenado ante la llegada de la temida 12ª SS División Panzer Hitlerjugend, compuesta por jóvenes y fanatizados nazis, que no temían el combate ni pensaban en la rendición. A lo largo de dos meses siguientes encarnizados combates enfrentarán a canadienses y SS por la toma de Caen.


Sword Beach

     Es el sector más al este elegido por el mando aliado, que terminaba en Ouistreham y la desembocadura del Orne, a la izquierda de Juno. El ataque frontal contra las poderosas defensas en Ouistreham no era aconsejable, y gran parte de la zona era muy rocosa, así que se decidió desembarcar en una estrecha lengua de tierra. La 3ª División británica (general Rennie) era la encargada del ataque principal, flanqueada por "boinas verdes" y el 45º Commando de los Royal Marines. A la 1ª Brigada escocesa se le encomendó flanquear y tomar Ouistreham.


   
      Las primeras brigadas de la 3ª División consiguen desembarcar y avanzar a pesar de la dura oposición germana. El objetivo era vital: tomar la ciudad de Caen, contactando para ello con la 6ª División aerotransportada británica. Pero la playa resultó ser demasiada estrecha para el desembarco de equipo pesado que se ralentizó, además de los focos de resistencia en las villas costeras que también frenaban el avance.


     

      Para colmo, alrededor de Caen se encontraba la única formación alemana mecanizada presente en el día D: la poderosa 21ª División Panzer. En formación entre los ríos Orne y Dives, debía enfrentarse a los aliados que invadiesen la zona. Los alemanes esperaron a las 16:30 h. para contratacar, demasiado tarde.






 

      
      Fueron rechazados, y unicamente el batallón de granaderos Panzer consiguió infiltrarse entre la 3ª división canadiense y la 3ª división inglesa. Finalmente se retiraron bajo la amenaza de verse cercados por los refuerzos de la 6º Aerotransportada provenientes del interior. Aún así, la 21ª Panzer provocó semanas de furiosos combates frente a Caen, clavando a los británicos en la playa de Sword y retrasando el avance aliado. 


Final del Día. Conclusión.

     A pesar de la fuerte resistencia alemana en algunos sectores como Omaha y Sword, los aliados consiguen al final del día 6 desembarcar unos 150.000 hombres, vehículos y pertrechos, asegurando una cabeza de puente suficientemente amplia a lo largo de toda la costa para seguir desembarcando más divisiones y su avituallamiento; las bajas ascendieron a 9.000, menos de las que se calculaban. La enorme superioridad numérica era una ventaja táctica en sí. El publicitado inexpugnable Muro del Atlántico alemán se había resquebrajado a las primeras de cambio. Bien es cierto que la calidad de las tropas defensivas alemanas era de segunda categoría. Hitler disponía de 3 Divisiones Panzer en reserva próximas a la zona, además de la 21ª, pero le prohibía al mariscal von Rundsted ponerlas en movimiento. Había caído en el señuelo preparado por los servicios secretos aliados, y todavía al final del día D sostenía que el verdadero ataque aliado se iba a producir más al norte, en el Pas de Calais. De haber permitido que las Divisiones Panzer atacaran directamente las cabezas de playa, el desembarco aliado se hubiese visto seriamente comprometido y las bajas serían mucho más elevedas.

    Otra gran ventaja táctica de los aliados era el total control del mar y el predominio del cielo normando. La RAF y la US Air Force bombardearon posiciones y columnas alemanas sin descanso, mientras el clima se lo permitió. El mismísimo mariscal Erwin Rommel sería herido de gravedad por el ataque de un Spitfire británico el 17 de julio y evacuado a Berlín. La Luftwaffe brilló por su ausencia, con la simbólica aparición de algunos cazas Me109 que apenas hicieron mella en las fuerzas aliadas. Incluso si las anteriormente citadas Divisiones Panzer hubiesen llegado a las playas, los cazabombarderos aliados les hubiesen producido un enorme daño (como se comprobaría semanas después). La fanfarronería de Göering volvía a perjudicar gravemente a las fuerzas armadas alemanas.

    Algunas fuentes e historiadores militares indican que si Hitler hubiese ordenado bombardear las cabezas de playa con bombas volantes V1 y V2 el plan aliado se vendría abajo o se alargaría en el tiempo, lo que permitiría la llegada de refuerzos de la Wermacht desde otros frentes. Pero la obsesión del Führer con aterrorizar Londres y demás ciudades inglesas no le dejaba ver con claridad el daño militar que podrían haber hecho sus "armas secretas".

    El desembarco fue un éxito estratégico para los aliados, minuciosamente preparado durante meses por Eisenhower y su cuartel general, con el total apoyo de Roosevelt y Churchill y la filosofía de "Alemania primero", concediendo así el ansiado respiro aStalin con la apertura de un Frente Occidental. Para Alemania ya solo era cuestión de tiempo; sus ejércitos aún eran temibles, pero los reemplazos ya no eran de calidad, faltaban veteranos, los bombardeos aliados sobre Alemania mermaban la fabricación de armamento y la reserva de materias primas se agotaba. Demasiados contratiempos para combatir en dos frentes a la vez: en 9 meses la guerra en Europa tocaría a su fin.